El sembrador
Jesús, usaba un lenguaje simple con ejemplos tomados de la vida cotidiana; un mensaje que llegaba directo al corazón
En la parábola del sembrador, se presenta como uno que no impone, sino que propone; se dona, echa la semilla. Esparce con generosidad la semilla de la Palabra.
Parte cae en terreno pedregoso…no consigue echar raíces. Ese corazón no persevera, se cansa y no “despega” nunca.
Parte cae en un terreno lleno de zarzas. ¿Qué representan las zarzas? La preocupación del mundo y a seducción de a riqueza, Las zarzas son vicios que se pelean con Dios, que asfixian su presencia.
Las semillas que caen en tierra buena echan raíces, brotan y crecen hasta dar espigas esbeltas.