El mejor interlocutor: Dios Si quieres que Dios te hable, no esperes que te mande un correo electrónico. Él tiene un medio mucho más íntimo y personal: la oración. Cuando oras, Dios te susurra al oído, te abraza, te corrige, te anima, te ilumina, te guía. Te muestra lo que sueña para ti, lo que…