La gracia de la simplicidad
Francisco tenía la gracia de la simplicidad “Ni un pajarito cae en tierra sin que lo sepa vuestro Padre…No temáis!” Llegado a una gran manada de pájaros, el bienaventurado Francisco se dio cuenta que le esperaban. Les dirigió su saludo habitual, se admiraba de que no se escaparan como de costumbre, les dijo que debían…